
El día de hoy nos íbamos a adentrar de lleno en el cantón del Ticino. Teníamos previstas muchas visitas para el día de hoy, siendo uno de los días del que más disfrutaríamos de este viaje a Suiza en 4 días. Vamos a describiros todo lo que hacer en el Ticino para que vuestro viaje sea inolvidable.
Índice
Presa de Verzasca
Ese día desayunamos en el hotel y pusimos rumbo a nuestra primera parada del Ticino, la presa Verzasca. Desde Lugano hasta aquí hay algo menos de una hora en coche.

A nosotros esta presa nos caía de paso hacia otros puntos de interés. Ir de propio no lo recomendamos porque, aunque impacta y es chula de ver, un viaje para sólo eso nos parece desproporcionado.
¿SABÍAS QUE...esta presa es un escenario de película? Aquí se rodó la película GoldenEye de la saga de James Bond. Además deciros, que para los más aventureros, podréis emular el salto haciendo puenting.
Lavertezzo
A menos de 8 km de la presa, encontramos el pueblo de Lavertezzo. Es un paisaje muy bonito. Tuvimos suerte de aparcar, ya que no hay muchas plazas disponibles y los turistas eran abundantes. Nos dirigimos hacia el puente medieval desde donde la vista del río Verzasca es genial.


Las formaciones rocosas que limitan el cauce del río, junto con el color azulado de éste, hace del lugar un paisaje de cuento. En abril, cuando fuimos nosotros no apetecía meterse en sus gélidas aguas jajaja. Pero había personas haciendo buceo. Si váis en verano no dudéis de daros un fresco chapuzón en sus aguas.

Aún así disfrutamos de aquel soleado día. El problema que tuvimos es que en nuestra planificación, dispusimos de demasiadas visitas aquella mañana. En este momento nos dimos cuenta de que había que anular alguna de ellas y así disfrutar más de este paraje.

Si vais a visitar la zona os recomendamos que si tenéis poco tiempo, como era nuestro caso, dediquéis una mañana completa a disfrutar de algún sendero por esta zona. A nosotros nos quedó esta espinita ya que quisimos abarcar más de lo que esta corta escapada nos permitía. Igualmente, disfrutamos mucho paseando un rato entre las rocas.

Madonna di Sasso
Con este paisaje en la retina, nos dirigimos hacia Locarno, ciudad donde se halla el santuario de Madonna di Sasso. Tras 16 km llegamos a Locarno donde nos dirigimos hacia una pizzería donde preparaban comida para llevar, llamado L’Archetto Take away. Allí compramos un par de pizzas muy caseras y muy buenas. La idea era comer al subir al santuario, con Locarno a nuestros pies. Pero, empezaron nuestras dudas sobre si en el funicular podríamos subir comida. Así que nos sentamos en una plaza de Locarno y disfrutamos de nuestra comida.

Tras comer y aparcar el coche, cogimos el funicular que nos llevaría al santuario. Se puede subir en coche particular con el consiguiente problema de aparcamiento y también realizando un sendero de media hora. El trayecto en funicular es de unos 15 minutos con agradables vistas. A nuestro entender lo que más merece la pena de esta visita, aunque esté mal decirlo son las vistas. El santuario es bonito, pero las vistas espectaculares.

Bellinzona
Bajamos de nuevo en funicular y observamos brevemente que la ciudad de Locarno tiene mucho ambiente. Ya os decíamos antes que el día de hoy iba un poco justo de tiempo. Por ello, pusimos rumbo hacia nuestro próximo y último destino, Bellinzona. Nuestro hotel, del cual ya os hablamos en nuestro post Viaje a Suiza en 3 días, estaba situado a las afueras por lo que, tras hacer el check-in, nos adentramos en la ciudad.
Ésta es una ciudad muy bonita, que te transporta al medievo inmediatamente. ¡Tiene tres castillos nada más y nada menos! Son Castelgrande (que es el mejor conservado), Montebello y Sasso Corbaro. Castelgrande es el que visitamos. Es el que más abajo se encuentra por lo que las vistas de los otros dos desde Castelgrande son geniales.


La visita es gratuita y puedes recorrer distintos recintos del castillo. A nosotros lo que más nos gustó fue recorrer sus murallas. Además como ya os decíamos antes, el tiempo nos acompañó en el día de hoy. Aquí estuvimos unas dos horas.


Con el coche intentamos acceder a Montebello, pero no encontramos el camino. Así que pasamos directamente a Sasso Corbaro, pero es mucho más pequeño que Castelgrande. Por lo que de este último castillo lo que más disfrutamos fue de las vistas de la ciudad y de Castelgrande desde las alturas 🙂
¿SABÍAS QUE...el acceso a Castelgrande no deja indiferente a nadie? Se accede desde un ascensor, que está muy bien integrado con el entorno. Recordad que la visita a los tres castillos es gratuita.
Cenar
Esta ciudad nos encantó. Para finalizar este día tan genial, fuimos a cenar al restaurante Il Fermento. Cenamos una ensalada, una tabla de quesos y una pizza por un precio asumible para ser Suiza.


Al día siguiente disfrutaríamos del Lago Maggiore en nuestra ruta de vuelta hacia Bérgamo. En breves os contamos cómo fue 😛
Mapa
Compartimos con vosotros el siguiente mapa donde podréis consultar el itinerario del día. También encontrareis en él los puntos de interés, restaurantes y mucha más información 😛 .